Padre Alberto:

“El amor resuelve los problemas”

Oficia misas, escribe la columna Consejos de amigo en El Nuevo Herald, conduce el programa Línea directa, vía radio Paz, por si fuera poco, su libro Ama de Verdad, Vive de Verdad, es todo un éxito en ventas. Miami en Escena fue en busca del Padre Alberto Cutié, no para confesarse, sino para hablar sobre los conflictos de pareja, un tema de “moda”, en nuestra actual sociedad.

Padre, los divorcios constituyen el pan nuestro de cada día. ¿Su libro se lanza como una manera de contrarrestar está “moda”?
En realidad, el libro es para ayudar en puntos básicos en el tema de las relaciones de pareja, en otras palabras, buscar soluciones durante una crisis. No hay problema más duro y vigente como las relaciones de pareja. Todo el mundo, quiere vivir en un mundo mejor, pero si no hay una familia buena, no puede haber mundo mejor. El matrimonio es el fundamento de una familia sana y para llegar a constituir un hogar sano hay que construir los simientos.

Pero en la actualidad los matrimonios son sinónimos de crisis, fracasos...
Los matrimonios tienen las mismas dificultades de siempre, pero ahora se vive en un mundo más complicado. El mundo de ahora, no está focalizado en el matrimonio, todo lo contrario, desde que el ser humano viene al mundo se lo entrena para ser independiente, buscar una posición, dinero, por lo tanto la sociedad de hoy no se presta para cultivar buenos matrimonios.

Frente a este coyuntura, totalmente desoladora cabe una pregunta ¿Existe el amor?
Por supuesto que existe el amor. Cuando hay amor, se resuelven todos los problemas, si no hay amor, todo se complica, nada se resuelve.

Por qué el número de solteras y madres solteras acaparan cifras alarmantes
Porque se han convertido en una norma en nuestra sociedad. El problema de los divorcios es muy fuerte. Parte de la realidad tiene que ver con personas que no pueden superar dificultadas básicas como los conflictos entre las parejas.

De qué manera se puede resolver este problema
Simple. La base de la relación de toda pareja debe ser sólida. Para ello se necesita buena comunicación, actuar con honestidad, tolerancia y aprender aceptar nuestras diferencias.