¡Honores al maestro! Imposible no hablar de Philip Roth, uno
de nuestros grandes y preferidos escritores americanos: “Goodbye, Columbus”, “El
mal de Portnoy”, “Pastoral americana”, (ganadora del Pulitzer), “Me casé con un
comunista”, “La mancha humana” y paramos de contar. Considerado “el chico malo
sin pelos en la lengua, satírico, irreverente, crudo, sexual y rabiosamente
judío”, acaba de ser galardonado
con el premio Príncipe de Asturias de las Letras 2012, por su capacidad para
mostrar una compleja visión de la realidad “que se debate entre la razón y los
sentimientos, como el signo de los tiempos y el desasosiego del presente",
dijo el jurado. Philip Roth, uno de los últimos novelistas vivos de la estirpe
de grandes nombres de la narrativa norteamericana de la segunda mitad del siglo
XX, es también un explorador del sexo en todas las edades y vertientes, nutre
sus novelas de una desesperación vital que le han llevado a propuestas
surrealistas como en “El animal moribundo”, libro que fue adaptado al cine por
Isabel Coixet, bajo el título de La Elegida (Elegy, 2008) con Penélope Cruz y Ben
Kingsley. ¡Viva maestro!